De su guía sobre esos equipos de pintura y estampa en España, Julia Barroso Villar anticipaba el problema de diferenciar {entre} universidad, camarilla y fuerza laboral, cuyas lindes se difuminaban mucho en la acogida de un contenido textual programático como dentro del variedad de integrantes y sus respectivas poéticas. Aquella situación prácticamente indispensable de los angeles «cercanía física» de sus miembros se transforma, dentro del siglo XXI, en un requisito secundario, merced a un mundo globalizado e interconectado. Simplemente desde esta premisa transnacional se sabe la viabilidad de colectivos como La Kavra, creado en 2016 «por accidente», de acuerdo con nos dice Pedro Molina, intérprete multidisciplinar residente en Marbella y coordinador de las {acciones} y iniciativas, secundados por partícipes físicos (29 en esta ocasión) y digitales (856 repartidos en tres continentes).
