El actor alicantino Juli Mira, con una destacada carrera en el ámbito teatral, cinematográfico y televisivo a escala nacional, ha fallecido en la madrugada de este sábado a los 75 años de edad, según han adelantado fuentes municipales. Figura muy reconocida especialmente en el audiovisual elaborado en la Comunidad Valenciana, participó en numerosas series, películas y obras teatrales, alternando todos estos campos de la interpretación con el doblaje, gracias a su característica voz grave. Su trabajo le valió el reconocimiento de diferentes instituciones, entre ellas el Ayuntamiento de Alcoy, que ha expresado en un comunicado su gran pesar por el deceso.
Juli Mira interpretó a lo largo de su trayectoria profesional papeles tanto secundarios como protagonistas en todo tipo de formatos audiovisuales y dramatúrgicos. El Ayuntamiento de Alcoy lo destaca como el “prototipo del actor autodidacta”, dotado de unas “innatas cualidades expresivas y un innegable magnetismo en escena“, que le permitieron “desarrollar un amplio registro interpretativo en producciones adscritas a todo tipo de géneros”.
Su afición interpretativa, añaden desde el Consistorio, empezó a aflorar en su etapa estudiantil, dando sus primeros pasos como actor aficionado en el grupo de teatro Assalla. Posteriormente formó parte del célebre grupo teatral alcoyano La Cazuela, que tuvo un papel fundamental en el desarrollo de las artes escénicas en la ciudad desde finales de la década de 1960. Con él debutó en 1972 con la obra “El retaule del flautista”, publicada cuatro años antes por Jordi Teixidor.
En 1978 realizó su primera incursión en el cine, en la película “La portentosa vida del pare Vicent”. Desde entonces tuvo una presencia constante en películas y series de televisión, destacando en papeles como el de Vicente Blasco Ibáñez en el telefilm “Cartas de Sorolla”, producido por la desaparecida Canal 9 en 2006, y más recientemente en la serie “Desenterrats”, emitida por À Punt. Asimismo, entre sus intervenciones en el cine destacan “Gràcies per la propina” (1996), de Francesc Bellmunt; “El mar” (1999), de Agustí Villaronga; “L’illa de l’holandés” (2000), de Sigfrid Monleón; “Las voces de la noche” (2003), de Salvador García, y “Ens veiem demà” (2009), de Xavier Berraondo.
El actor mantuvo siempre una gran vinculación con Alcoy, que quedó reflejada en el Premi 9 d’Octubre que el Ayuntamiento le concedió en 2022. Además, era festero de la filà Domingo Miques, y ayudó al Embajador Real a transmitir el mensaje de los Reyes Magos en 2015. También la Generalitat Valenciana le concedió en 2021 la distinción al Mérito Cultural.
El Ayuntamiento de Alcoy ha mostrado públicamente, a través del mismo comunicado, su apoyo y solidaridad a la familia, compañeros y amigos de Juli Mira, en unos momentos muy dolorosos por todos aquellos que han vivido y trabajado a su lado. El alcalde, Toni Francés, ha señalado que “nos ha dejado un gran actor, un alcoyano que se ha labrado su trayectoria a base de esfuerzo”. En esa carrera, ha comentado el primer edil, ha mostrado “una gran calidad interpretativa que le ha hecho recibir numerosos reconocimientos”, y también “una gran cualidad humana, siendo una persona querida por todas las personas que lo han conocido“, y a quien “la ciudad siempre recordará de forma positiva”.
Comprometido con la cultura
La capilla ardiente está instalada en el Tanatorio San Jorge de Alcoy desde las 12.00 horas de este sábado y ha sido visitada por numerosos ciudadanos y personalidades representativas de la ciudad, la cultura o la política. A las puertas, el alcalde ha reiterado que se marcha “un gran amigo”, con el cual “hemos compartido muchos momentos”, pero sobre todo “un referente en la Comunidad Valenciana, un actor imprescindible y una persona extraordinaria”. Francés ha calificado a Mira como “un alcoyano único” resaltando su “presencia” y el hecho de que a donde iba “llevaba el nombre” de la ciudad, lo cual le valió “el aprecio y la estima” de sus convecinos.
Una de las autoridades que han acudido a despedir a Juli Mira ha sido el expresidente de la Generalitat Ximo Puig, quien ha elogiado al fallecido actor como “un intelectual, una persona fundamental para entender la escena” de la Comunidad Valenciana, más allá de su valía como artista. Mira fue, según el exjefe del Consell, un ejemplo de que “la cultura genera personas con conciencia y capacidad crítica”, además de comprometerse a lo largo de toda su carrera profesional con “la defensa de su cultura y de su lengua”. “Nos ha dejado un gran legado”, ha afirmado.
El destino ha querido que el fallecimiento de Juli Mira se produzca justo cuatro años después del de otra figura destacada alcoyana en el ámbito de la cultura, Isabel-Clara Simó, cuyo deceso ocurrió el 13 de enero de 2020. Puig ha resaltado esta coincidencia para destacar que “Alcoy ha generado artistas de dimensión extraordinaria“, y que “la cultura es a clave de bóveda de un país, y eso es lo que queremos reivindicar” rindiendo el último adiós a una personalidad como Mira. Asimismo, ha incidido en elogiar al actor como alguien “humilde, abierto, honesto, que siempre pensó que la cultura nos hace más dignos”.
También ha acudido al velatorio la diputada de Compromís en el Congreso Àgueda Micó, quien ha destacado que Mira “representa la cultura de Alcoy y del País Valenciano” y “la defensa de la idiosincrasia de ser valenciano”. “Ha sido un referente en la defensa de la lengua y la cultura propias“, ha añadido. La muerte de Juli Mira no solo coincide en el calendario con la de Isabel-Clara Simó, sino también con otra figura destacada en la defensa de la cultura y del valenciano, y además de la comarca, el escritor de Castalla Enric Valor, fallecido el 13 de enero de 2000.
Por otro lado, también el Insititut Valencià de Cultura ha transmitido su pésame “a la familia, amigos y compañeros profesionales del gran actor Juli Mira”. El artista, ha recordado este organismo, recibió un Premio de Honor del Audiovisual Valenciano “por su gran aportación interpretativa en el mundo del cine, la televisión y el doblaje”, además de “trabajar como actor de teatro y colaborar con muchos músicos valencianos”. “Su potencia interpretativa y su carácter próximo y humano nos acompañarán siempre”, ha señalado.
