Cinco años después de ser diagnosticada con un carcinoma basocelular, el tipo de cáncer de piel más común, Mónica Carrillo ha vuelto a compartir su experiencia a través de Instagram. La periodista de Antena 3 ha publicado un mensaje acompañado de imágenes sin filtros para mostrar cómo ha evolucionado su cicatriz y lanzar un mensaje de prevención y visibilidad.
“El 16 de junio el doctor me intervino con cirugía de Mohs hasta que quedó limpia la zona”, recuerda Carrillo. Aquel verano de 2020, en plena salida de la pandemia, fue “atípico” y vino acompañado de “protección solar, apósitos, gorras y grandes dosis de paciencia”. Aunque no suele hablar de su vida privada, en ese momento decidió hacerlo porque las redes podían servir para dar visibilidad a algo importante.
Desde entonces, ha recibido mensajes de muchas personas en situaciones similares: “Heridas que no cierran, manchas, lunares irregulares… Si mi testimonio ha servido para animar a ir a revisiones y calmar la angustia de alguien, me doy por satisfecha”, asegura.
En esta nueva publicación, Carrillo reivindica la filosofía japonesa del kintsugi, que consiste en resaltar las cicatrices con oro en lugar de ocultarlas. “Creo firmemente que somos todo lo que nos ha hecho llegar hasta aquí. A partir de ahora, a mí me acompañará este arañazo en el rostro. Ya nos estamos acostumbrando y creo que incluso nos caemos bien”. Con su habitual tono cercano, la presentadora concluye con un consejo claro: “Cuídense, vayan al dermatólogo y protéjanse del sol. Salud”.
